Los hombres y los animales

Cuando mencionamos el nombre de animales, no podemos soslayar a los fabulistas quienes a través de una historieta alegórica, presentan a estas criaturas discurriendo, para entresacar después una verdad moral. Tenemos que agradecer a Esopo, Fedro, La Fontaine, Iriarte, Samaniego, Grey, Gellert, Trilussa, Melgar y muchos más, quienes nos enseñaron las virtudes y defectos a través de sus personajes. Los caricaturistas conocen esta realidad. Saben que en el rostro de cada persona, un animal está. También está el peso, color, tamaño, fuerza, carácter, fidelidad, etc.

De ahí que en nuestros países latinoamericanos, en su mayoría, se les llama pintorescamente a los deportistas, políticos y otros, con el nombre de un animal. En cambio en otros países, la denominación de nuestra fauna universal no apunta hacia la fama del ser más evolucionado de la escala zoológica.

Uno de los primeros entrevistados para averiguar los apodos de futbolistas fue mi pequeño hijo que como muchos de nosotros, sufre cada vez que pierde nuestro equipo. He aquí algunos:

¡Patos al agua! Y una buena cantidad. En Argentina donde abunda la carne de res, tenemos al “Pato” Fillol, al “Pato” Bondansieri, al “Pato” Domínguez. Nosotros tenemos al “Pato” Quinteros, al “Pato” Cabanillas y cuántos patos más que aparecen en los programas juveniles de la televisión. Por supuesto, que no tienen ninguna relación con el Pato Lucas ni con el Pato Donald, aunque ellos preferirían recordar al Tío Rico Mac Pato, para ver si les sale un contrato en algún equipo de Italia o España.

A pesar de que los cartagineses llamaron a España “Tierra de conejos”, es en el Perú donde tenemos a conejos tan famosos como el Conejo de la Suerte. Uno de ellos es el famoso ”Conejo” Benites que fue uno de los primeros futbolistas peruanos que jugaron en Europa. Otro de los conejos que han pasado por el fútbol peruano ha sido el “Conejo” Rebosio que ahora se dedica al baile, los negocios y no sé qué. Brasil nos importó al “Conejín” Julinho que jugaba al balompié a través de la samba y el vals.

Muchas veces escuchamos decir “Tiene la fuerza de un toro” y tenemos en la mitología al Minotauro, hijo de la mujer del rey Minos. El minotauro era mitad hombre, mitad toro y fue vencido por el hijo del rey Egeo: Teseo. Otro toro famoso fue el tristemente célebre “Islero”, toro de Miura que mató al torero Manolete.

En la novela de José María Arguedas Yawar fiesta, destaca el Misitu. En el deporte, el “Toro” Cantoro, futbolista, “El toro de las pampas”, Luis Ángel Firpo, magnífico boxeador argentino que logró sacar del ring al campeón mundial Jack Dempsey. El cineasta Scorsese tiene una magnífica película llamada “El toro salvaje”, basada en la vida de un boxeador.

Hay una expresión muy conocida que usan las personas cuando tienen que tomar una decisión importante: “Al toro por las astas”. Esta expresión se tomó de la mitología griega cuando el héroe Jasón que iba con sus argonautas en busca del vellocino de oro tuvo que enfrentarse a un toro y recibió un buen consejo: “Al toro por las astas”.

En la música afroamericana peruana se escucha la canción “Toro mata” y se exalta la fuerza del toro con la vida del hombre en la tierra.

La lista de los animales sigue y aunque los rusos son representados por el oso, Lev Yashin, leyenda futbolística rusa era conocido como “La araña negra”. Solía vestir con camiseta negra. Nosotros tenemos a la”Culebra” Carrillo, el “Cuy” Sánchez, el “Camello” Soto, el “Puma” Carranza, el “Zorro” Marengo, “Colibrí” Rodríguez, “La Foquita” Farfán, el”Coyote” Rivera, el “Cóndor” Mendoza y si de pulgas se trata, tenemos en el Perú a la “Pulga”Ruidíaz y en Argentina al extraordinario futbolista la “Pulga Messi quien juega en España en el equipo Barcelona, más conocido como el “Barza”.

Algunos apodos no suenan tan agradables, pero están en el ambiente futbolístico. Tal es el caso de “Niño rata “ Solano, “Murciélago flaco” Lobatón, la “Chancha” Pinillos, “Oso hormiguero” José Soto.

En México está el “Pájaro” Hernández; en Argentina, el “Burrito” Ortega, el “Piojo” López.

Los monos no pueden faltar, así que tenemos al ”Mono” Burgos, el “Monito” Noriega, mi amigo el “Mono” Táber.

Hace varias décadas tuvimos al “Gato” Bulnes y después “el León de José Díaz”, Don Guillermo Delgado.

No solamente en fútbol tuvimos los apodos con nombres de animales. En baloncesto o básquetbol tuvimos al “Camarón” Fernández y después en la época de los Hermanos Duarte, tuvimos al “Pulpo” Sangio.

En automovilismo, se escuchaba el nombre de” la liebre”  que era un carro de un famoso corredor de autos. Tuvimos también al “Zorro” Yangali y en estos tiempos al “Mono” Orlandini, al “Ratón” Hart.

En el canto, Perú tuvo al “Mono” Altamirano y Venezuela tiene al “Puma” Rodríguez.

Los nombres de animales no solamente están en el deporte sino en el ambiente de trabajo, estudio y amistad. El círculo que yo frecuentaba tenía varios caballos. Uno era conocido como “Caballo viejo”, por las canas que tenía; otro, recibía el apodo de “Caballo loco”, aunque nadie se atrevía a decirlo. El tercero, futbolista como los dos anteriores, “Caballo”, también, sin embargo, cada vez que fallaba un gol, sus compañeros le decían “Mula”.

En este mismo grupo “teníamos” sapos, ranas, aves grandes como el cóndor y pequeñas como el pajarito, loros, urracas. También estaban los monos y cerdos o chanchos, patillos, morsas, mapaches, amén de gansos, gallinas, gallos y lagartijas. Excelentes ejemplares para el próximo diluvio. Este magnífico grupo de la fauna claretiana, me animó a escribir mi libro de versos: La infancia del zoo, y Como una loba, novela reciente.

En la música, tenemos al “Gato” Barbieri, brillante saxofonista argentino.

Guillermo Federico Cody(1846-1917), era un coronel norteamericano que dio a conocer a todo el mundo mediante espectáculos de circo, la vida de los indios del oeste. Él fue conocido como “Bufalo Bill”. Entre los indios famosos con nombres de animales, me permito señalar a “Toro sentado”, “Caballo loco”, “Águila negra”.

El siguiente capítulo sigue en el mundo de los animales y las comparaciones con el ser humano.