Capítulo 32
Conciliábulo en el castillo
A las once y media de la noche,
en el castillo del Conde Jorginho, empezaron a llegar los zooters más
importantes de la Comunidad de San Patricio. Una de las primeras en llegar fue
Elisabetta di Sardegna y su séquito, entre ellas Agnezka de los Milagros,
Rowina de Southampton, Alejandra del Cuadro. Era el cuadro principal de las
vampiras, enemigas irreconciliables de los licántropos. También llegó en su
carruaje, el Auditor Mayor del Reino, El Conde Hectorius, un personaje muy
cercano al Obispo de Canterbury y a los intermedios pero que sus amistades se
encontraban entre nosotros. Él y el Conde Nolberto jugaban siempre al
contrapunto. No se molestaban, y cuando se convertía en zooter, el troll
perseguía al cuy para “darle perejil”.
El Tío Ben y el Conde Jorginho
también jugaban desde hace mucho tiempo el famoso “periquete”, un juego mágico
que identificaba su amistad. A pesar que el Conde Jorginho era el Jefe político
de la Comunidad y el Obispo era el Jefe religioso, este no fue invitado, debido a que los licans y las serpientes eran
muy allegados a él. En cambio, Don Juan de Aviraneta, el teórico acerca de
licantropía sí fue invitado, además del Troll, El Señor Lapitt de Sajonia; El
buen tejón Simonal de Bahía; Angelo Burana, músico y amigo mío, marqueses y
marquesas, barones y baronesas; la familia del Conde, mi familia y huéspedes.
Maluxa, Andreinha y Janice,
prepararon el aquelarre en el patio principal del castillo y con la ayuda de Mick,
Tanger y Collins vigilaban el castillo.
En cuanto a Ghara y Harally, estuvieron muy cerca del jardín para evitar que
algún intruso osara husmear la Gran
Reunión de la Fraternidad. Este conciliábulo que empezó a las doce en punto de
la noche, fue dirigido por el Conde
Jorginho, Jefe de los lobos y los zooters amigos. La mesa que se empleo, fue redonda como la que usaba el Rey Arturo
con los Caballeros de la mesa redonda. La idea fue de las tres brujitas, descendientes de Morgana. Entre los
presentes, tres leían el pensamiento y se ubicaron uno en cada vértice del
círculo de la mesa por razones de seguridad.
Elisabetta que ya había
solicitado la bandera de la paz con los lobos, después del incidente en el
Atlantic, expuso en forma clara y
concisa los principios de La Comunidad de San Patricio referentes a los
crímenes contra los más débiles, es decir, los campesinos, cuyas hijas eran
violadas y muertas por los licántropos. Los periódicos no habían informado
sobre estos asesinatos debido a que consideraban estos hechos como cosas del
diablo y brujería.
Nolberto, “amigo de todos”,
informó que los últimos ataques de los licans y sus aliadas, las serpientes se
habían realizado contra el Conde y la manada. Que no desmayáramos en la defensa
y seguridad de los amigos.
Hectorius hizo recordar la muerte
de Frosina, una gaviota que estaba desprotegida y que fue engañada por Vudko y
después de ser violada y torturada, su cuerpo fue despedazado por este vil
asesino. Informó también que la policía lo ha visto por los alrededores de San
Patricio y que no debemos permitirle la entrada. En todo caso, capturarlo y
darle el castigo que se merece.
Juan de Aviraneta puso en autos a
los circunstantes que un nuevo lican estaba en San Patricio y que era el
protegido de Varko. Su nombre: Garba y parece que el Obispo le ha dado trabajo.
Para no despertar sospechas, este íncubo se ha cambiado de nombre y lo
llaman José como tantos otros.
Mientras se discutía en la Mesa
redonda cómo enfrentarse a los licans, mi amigo Simonal sintió un olorcillo que
era muy característico en los de su raza y me avisó que Lurok, el malvado tejón
y amigo de Anulia, la vieja, desdentada y ponzoñosa cobra, estaba en el pino
más alto del jardín, probablemente, escuchaba lo que el grupo discutía. Ya mis
duendecillos lo habían ubicado
Haciendo
sus pinitos
Estaba
el tejón
Te
quedarás solito
Si
te doy un aventón.
Collins le dio una patada a Lurok
y este cayó cerca a la mesa y fue atrapada por el Conde Nolberto. El malvado y
cobarde tejón, con su cara de yo no fui se puso a llorar y dijo con el rostro
desencajado que él pasaba por allí y que alguien le dio un puntapié y cayó.
Nosotros que ya conocíamos a este soplón de la vieja cobra, no le creímos y
Jorginho le administró una pócima que Yasmina le alcanzó para que el tejón se olvidara por lo menos un mes de
lo que había hecho. Obligó a Lurok a bebérsela. Este la bebió toda para evitar
que Yasmina lo despedazara y fue amarrado a un árbol y sirvió de blanco a Mick,
Tanger y Collins que le lanzaban unas piedrecillas que las tres brujitas habían
rociado con un líquido que producía ardor y picazón. Lurok sufría y se
lamentaba de ser amigo de Anulia y las otras serpientes, más aún que estaba
enamorado de una bella flamenco que llegó a la Comunidad de San Patricio. ¿Cómo
se iba a presentar ante ella si el cuerpo le escocía y le producía un hedor que
ni él mismo lo soportaba.
Antes, Lurok fue diferente y muy
amigo de la manada, pero era holgazán como sus secuaces ofidios y después de
una y otra decepción amorosa, se pasó al lado malo de la Comunidad y se
encontró con su alma gemela. Aunque él no tenía ningún poder, hizo del chisme,
el insulto y la soplonería, sus armas de
combate. Hoy, estaba a merced de los trasgos que a través de los versos y el
juego se solazaban y castigaban al malvado tejón.
Eddy Gamarra Tirado
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