Capítulo 144

Corresponsal de guerra

Ha transcurrido una semana desde que Stephen viajó a Irak como corresponsal de guerra para un periódico británico. Leo las noticias y me deprimen las matanzas de los pueblos kurdos. Igualmente los asesinatos de periodistas para que cesen los bombardeos. No estuve de acuerdo con el viaje de Stephen, pero es su trabajo. Siempre arriesgando el pellejo en diferentes países de la tierra. Hace poco estuvo en la zona convulsionada de Ucrania y ahora le toca el norte de Irak. Los periodistas de otros países no saben de su condición zooter que le ayuda a ubicar al enemigo porque les lee el pensamiento y muchas veces ha huido como lobo para salvar su vida. El reloj que le dio Ghara, la hadita, le ayuda mucho para ubicar a los terroristas. En fin, tiene algunas ventajas que las utiliza al máximo. Sin embargo, la muerte está cerca y me preocupa bastante, me entristece tenerlo lejos. Estoy en la casa de mi padre con mi hijo y con la ayuda de las hadas, las brujitas y los traviesos Collins, Tanger y Micki. Ellos se van al colegio y a veces se demoran porque se quedan en el colegio para hacer deporte-según ellos-y tener la ocasión de estar cerca de Raisa, Fátima y Zarella. No me preocupo tanto por ellos porque saben defenderse muy bien.

Antonella y Sandra están en la Universidad; Nicole y Jean Pierre en la Planta eléctrica. La electricidad no es la especialidad de Nicole, pero está de secretaria de Jean Pierre, él la necesita y ella, también. Lurok, Wanda y la cotorra vieja, como siempre, espían mi casa. Son realmente inofensivos. Cada vez que se extralimitan reciben su merecido y vuelven por el vuelto. Parece que les gusta el golpe y ahora tienen un refuerzo que es el sapito de las ñatas bandidas que aprovecha su pequeño tamaño para meterse por alguna rendija y llegar al jardín. Estos aliados de la vieja cobra fueron diferentes alguna vez y como les gustaba el poder y no podían contra los licans y los asesores de Mr. Kanter, prefirieron unirse al enemigo y así adquirir más poder y poco a poco avanzar. Lamentablemente, los espías no podían contra nosotros. Los veíamos como personajes folklóricos que animaban la contienda entre los licans y las serpientes contra mi familia y los Dinos.

Papá estaba en el arco de entrada organizando el ingreso de los habitantes de la Comunidad. Había contratado con el conde Hectorius de Auseville a Celestino a quien ellos le llamaban caballo y tenía experiencia en el trabajo de la puerta de ingreso de los zooters residentes y zooters amigos. Papá me acompañaba en el castillo. No se ausentaba mucho. A veces visitaba a la vizcondesa de Marec, que vivía en la playa o estaba revisando toda la instalación eléctrica con la compañía de Jean Pierre y Nicole.

El tío Lapitt de Sajonia se fue al Pozuzo donde tenía su fábrica de cerveza y le prometió a papá traerle varias latas de su nueva producción de exportación. El tío Ben se está recuperando de una enfermedad y ojalá que nos visite porque lo extrañamos mucho. El tío Nolberto, el troll, ha regresado del Brasil y está muy contento porque uno de sus hijos se ha casado con una bella muchacha de Mina Gerais. Mis tíos viajan bastante como papá y Stephen. Siempre me traen recuerdos. Sin duda, el que más recuerdos trae es papá. Stephen tiene en nuestra sala unos hermosos zuecos rojos holandeses que papá le trajo de Amsterdam y son tan hermosos que le he pedido a Stephen no los use, sino que estén como adorno. Allí están en la sala con otros recuerdos de los amigos corresponsales de guerra de Stephen.

Ludwig y Marietta nos han invitado a su casa en la aldea para degustar un plato que preparaban en la hacienda de sus padres en Huaral: El famoso chancho al palo. Iré este sábado con las chicas,  sus parejas y los duendecillos. Maluxa, Andreínha y Janice acompañarán a las hadas en la vigilancia del castillo y todo el barrio de los Dinos. Ludwig ha invitado también a mi abuelo. Aunque él es casi vegetariano pero es un gran conversador al igual que Ludwig y sé que va a disfrutar de esta tarde. Hasán ya camina y pronuncia varias palabras. Al  abuelo Jorginho  le dice “Pappo” y papá se emociona cuando le pide la mano para caminar y les dice a los aldeanos que Hasán es su nieto y se siente orgulloso de él.

Ludwig había invitado a la hermana Visitación que ya no quería que la llamaran así. Ahora era Angeline la dama de los dulces y una conversadora de primera que le contaba chistes a Collins, Micki y Tanger y los hacía reír que ellos le exigían que contara más chistes. Angeline, le había tomado cariño a los chicos les prometió llevarles a la casa mazamorra cochina y arroz zambito. Ellos celebraron el ofrecimiento y le hacían ronda que Angeline agradecía con emoción. Mientras tanto, Ludwig escuchaba al abuelo, después de haberse comido dos platos de chancho al palo y varias copas de vino, poco a poco fue pestañeando hasta que se quedó completamente dormido con el rostro de felicidad.

Fue una tarde agradable que me hizo olvidar un poco la tristeza que tenía por Stephen. Hasán se quedó dormido, después de Ludwig y nos retiramos contentos de haber visto al abuelo y las ocurrencias de Angeline que causaban hilaridad a nuestros duendecillos. Todos estaban felices. El domingo nos reuniremos en el castillo para comentar las últimas incursiones de Lurok, Wanda, la cotorra vieja y el sapito Burú. Además intercambiar opiniones sobre los proyectos de Carmito y la garrapata, los planes de Varkolak y las innovaciones de Mr. Kanter en el CENTRADOM.

                                                                                                        Eddy Gamarra T.